domingo, 30 de diciembre de 2012

Proactividad para 2013



http://bit.ly/TzOacn

Todos los años por estas fechas es fácil que caigamos en esos momentos de reflexión en los que valoramos ¿cómo fue el año que se marcha?  Y pensemos, ¿cómo me gustaría que fuera el entrante? ¿Qué me gustaría cambiar? ¿Qué objetivos me propongo?  Pero este año tengo la impresión de que es distinto, de que no estamos afrontando 2013 con todo el impulso renovador con el que hemos abordado años anteriores. Y ello, por varias razones.


  • La primera: no sé si tú también sientes que 2012 ha sido un año con muchos avatares sociales, políticos y económicos; tantos que hemos vivido muy pendientes de lo que ocurría en la calle, asumiendo en distinta medida - depende de cada cual - el rol de espectador o el de activo participante para luchar por nuestros objetivos como comunidad.  Esto nos ha hecho re-enfocar la atención más hacia el exterior que hacia el interior de nosotros mismos.

  • La segunda: la incertidumbre ante el futuro, sobre todo el laboral, y la gran cantidad de cambios sobrevenidos en tan poco tiempo, algunos de los cuales ni podíamos imaginar hace tan sólo un par de años, nos hace quedarnos un poco en suspense y cuestionando nuestra capacidad para dirigir el propio destino. ¿No tienes cierta sensación de estar a la espera de que esto acabe? Y, encima, sin saber muy bien, qué es “esto”.


  • Tercera: la realidad de lo que estamos viviendo y la necesidad de adaptarnos a las nuevas condiciones nos lleva a replantearnos la vida de un modo global y a “simplificar” las cosas, quizá una de las pocas ventajas de todo lo vivido. Sin embargo, a veces esa simplificación esconde un “tirar la toalla”, una renuncia, un abandono. No es realmente una opción voluntaria a favor de la sencillez.


En resumen, que llegamos a los comienzos del nuevo año con una actitud más continuista que la de otras despedidas. Un poco, a la expectativa. Quizá también, hay muchos que recelan que 2013 sea peor aún y por eso prefieren mirarlo con cautela y sin moverse mucho. No hay objetivos para el próximo año, no hay ilusiones, deseos, … sólo un “qué me quede como estoy”, qué las cosas no vayan a peor y que pueda reaccionar a lo que llegue. Y, en efecto, 2013 puede traer más de lo mismo o circunstancias más adversas todavía, pero nosotros no podemos quedarnos a la espera, reaccionando sólo, “según y cuándo toque”.

En estos momentos, es cuando más que nunca debemos tener claro lo que queremos. Y no hablo de meros objetivos sino de algo mucho más construido, hablo de actitud. Actualmente,  el futuro empieza a demandarnos una actitud realmente proactiva. No podemos dejarnos llevar por lo bueno o malo que quiera traernos el 2013.

¿Qué es la proactividad y qué gano con ella? (en el post Diferencias entre las personas reactivas y las proactivas profundizo en estos conceptos). Vicktor Frankl, psiquiatra judío que vivió en un campo de concentración nazi y autor de El hombre en busca de sentido, define la proactividad de una manera muy sencilla "es la libertad de elegir nuestra actitud frente a las circunstancias de nuestra propia vida".

Así pues, no se trata de un simple actuar o tomar la iniciativa. Ser proactivo va más allá. Es una cuestión de actitud;  y de actitud hablamos cuando decidimos cómo vivir los tiempos en los que estamos inmersos. Determinar qué valores son los que quiero que rijan mi vida es la decisión clave.

Aunque nos sintamos tentados a jugar a la re-acción, te animo a vivir en la pro-acción. Y para ello, identifica lo que realmente te importa, las que son tus motivaciones en el día a día, las cuestiones y principios que son básicos en tu existencia, y a partir de ahí, define cómo quieres llevar una vida acorde con esos valores. Sólo así podrás elegir tu actitud ante las circunstancias, sólo así podrás tener claros tus objetivos y sólo así podrás mantener las fuerzas necesarias para perseguirlos.

Te animo a hacer este ejercicio de reflexión pues verás cómo hay pequeñas o grandes cosas que necesitan de ciertos cambios, y otras que precisan de ser muy cuidadas y protegidas. Unas y otras te servirán de guía para afrontar 2013 desde una actitud más proactiva.

Para cerrar este post y con los mejores deseos para 2013, te dejo un enlace a “Un pequeño libro-vídeo que te ayudará a ser feliz”.


En este vídeo - que encontré en el blog de Diego Serrano (buen coach además de orientador) -  se reúnen muchos, pequeños y valiosos propósitos. ¡Quizá alguno te vale!

No hay comentarios:

Publicar un comentario